La lectura del libro “Quién se ha llevado mi queso” junto con mi pasión por el cambio, hizo que en muchas ocasiones, la mejor o la única solución que veía a un problema era eso, cambiar, que tal vez y si hacíamos un análisis profundo podría traducirse en huir.

Sin embargo, cuando leí el libro “Fish” se me rompieron los esquemas. La lección que quería mostrar dicho libro era “aprende a disfrutar en donde estás”.

De ahí que desde entonces siempre haya tenido este dilema : ¿”Queso” o “Fish”? o traducido: ¿”Cambio” o “Mejora y/o Aceptación”?

Y esto es lo que se me plantean en muchas de las sesiones de coaching. A veces vienen clientes queriendo cambiar su situación. Y ello es porque el problema está “fuera” y lo mejor es cambiar. Pero puede suceder que dicho problema (pareja, tipo de jefe, compañeros, etc.) se repitan en el siguiente contexto donde caigamos.

Además, y los tiempos actuales influyen en ello, el cambio de lugar ya no es tan fácil. De aquí que en muchas ocasiones, esta imposibilidad de cambiar/huir nos fuerce a hacer otra lectura, que va más bien en línea a “¿qué tengo yo que cambiar para que esta situación no me resulte tan dura?” o “¿dónde tengo que focalizar mis esfuerzos para cambiar esta situación desde dentro?”

¿Cuándo es una mejor que la otra? ¿Cuándo aplicar “queso” o cuándo aplicar “fish”? Sinceramente eso es lo que tenemos que averiguar cada uno en función de las fuerzas internas que tengamos y los factores externos que nos rodean. A veces, salir de un entorno nos permite recuperar la alegría y la esencia que andamos reclamando. En otras, el trabajo interno es el reto para resolver la situación.

¿Cambio o Mejora y/o Aceptación?. That´s the question!