Observando esta sociedad podríamos llegar a la conclusión de que es como un sandwich. Es decir, con dos capas, el poder y el pueblo, y en medio, algunos idealistas despiertos.
La primera capa corresponde al poder, tanto político como económico. Este sustrato no quiere que las cosas cambien en absoluto. Pero ya no solo a nivel internacional, sino nacional, regional, insular y hasta local. Si ostentan el poder es por una serie de reglas que para nada querrán que varíen, o si no, propongan sustituir el petróleo como fuente de energía o en lo político, listas abiertas en las elecciones, no más de 8 años en el mismo cargo, doble vuelta para evitar la dictadura de los “partidos bisagra” o hasta incluso demandar, a similitud de los protocolos familiares (donde se exige determinada formación y experiencia para asumir cargos de la empresa familiar), un protocolo “político” que se refleje en una formación (académica, especializada y hasta con idiomas) y una previa experiencia acorde al cargo y al presupuesto que se maneja. Imposible ¿verdad?
Pero vayamos a la otra capa del sándwich, el pueblo ¿Realmente quiere cambiar las cosas? Porque para ello se exige compromiso, esfuerzo y pensar, mucho pensar. Pero no, están dormidos en el fútbol, en la conversación trivial sobre el famoseo, o viendo Gran Hermano como tema principal de sus tertulias, por no decir, la enorme preocupación de seguir la última moda que la televisión y las revistas nos hayan impuesto.
Y entre esas dos capas, hay una finísima de personas de todo ámbito social y cultural que sí quieren cambiar las cosas: desde un político con vocación, hasta un presidente de una asociación de vecinos o cualquier ciudadano que se preocupa de no quedar atrapado en este sueño intencionadamente idiotizante. Pero si por algo se caracterizan es por el desánimo, pues las cosas o no cambian o lo hacen muy lento.
¿Cómo deshacer este “sandwich”? Una roca se puede romper de dos formas: por el continuo golpe de una gota, o mediante una explosión. A lo largo de la historia hemos visto que determinados eventos como corrupción, catástrofes, hartazgo o vergüenza social, han generado cambios radicales. Pero también el silencioso esfuerzo de mucha gente que “gota a gota” han logrado hacer una mejor sociedad, a pesar de estar entre dos capas muy gruesas que por un lado lo impiden, y por otro no lo valoran ni lo buscan.
¿Qué hacer? ¿Tirar la toalla? Creo que aquí tenemos que imitar a los pintores: no pintar para que te compren, sino porque si no pintaras, sería el comienzo de una muerte anunciada
Y tu, ¿a qué capa perteneces?
Tan metafórico como real. Hasta que las «tapas» del sandwich no se conviertan en lechuga (es decir, ensalada total, aderezada y fresca), no habremos avanzado.
No soy pesimista porque observo que esos cambios existen más por la vía de la gota que de la explosión; incluso creo que es mejor.
Pero también me atrevería a decir que se está desplegando un tipo de actividad en torno a la innovación excesivamente narcisista: hablan –hablamos– de innovación, nos lo contamos de mil formas diferente y ya con eso pensamos que hacemos suficiente.
Artículos como este son necesarios porque remueven las conciencias, los espíritus y las voluntades. Es difícil, como lo es la vida del artista del final, pero es posible.
Totalmente de acuerdo Julio. Considero que tal vez hace falta aplicar el modelo G.R.OW. (Objetivos S.M.A.R.T, Realidad, Opciones y el qué, cómo, cuándo) a proyectos de transformación. Tras visitar empresas tras empresas, todos saben lo que falla y lo que hay que innovar. Algo así sucede con la sociedad, pero falla algo muy importante: que sea prioritario. Cuando hay peligro, eso se vuelve prioritario. De otra manera, el día a día, el estrés, las obligaciones y cierto gandulismo, duerme a cualquiera.
En fin, seguiremos siendo como los pintores y aplicando esa reflexión tan potente que dice «la Felicidad está en el viaje, no en el destino»!!
Joder pa tanto da un sandwich!!! La vida es para eso, para joderse cuando te toca y cuando no pa vivirla. Que seamos relleno o capa superior o inferior que más da!!! vivamos y punto. NO estamos jodidos o tan jodidos como muchos ni vivimos como reyes como otros. ESTAMOS VIVOS QUE ES LO IMPORTANTE
Juan, creoq ue a veces los ejemplos más simples son los que nos muestran la realidad… y en este caso… chocamos con la realidad!
Tiene sentido el cambio? Si, y no implica que este cambio deba ser un cambio drástico, sino que como dices, cada gota, genera un cambio. Se que es dificil, porque en distintos ambitos me pasa, que como bien dices el día a día de lo trivial supera a lo fundamental. Creo que los que estamso dispuestos al cambio, debemos tratar que cada gota genere asi como un efecto mariposa… una reacción.
Los invito a no bajar los brazos y a generar cambios en los distintos ámbitos donde se encuentran para que podamos desarrollarnos y evolucionar!!!
Habrá que prepararlos de 4 pisos pero eso es más peso para la capa baja del sandwich.
Saludos Tutor